La carta de un lector de El Periódico de Catalunya.
Un electricista en paro, de 45, años se ahorcó en un parque del Gornal, en L¿Hospitalet. Iban a desalojar a su familia del piso de Adigsa que había ocupado ilegalmente. Actualmente también hay otras familias en esa situación y, al mismo tiempo, se están recogiendo alimentos en diferentes puntos para dar de comer a ciudadanos que no tienen con qué vivir. Ese hombre, como muchos ciudadanos, gritó desde el silencio de su desesperanza ante la grave situación en que se encontraba su familia, y entendió que, para ser escuchado, tenía que suicidarse públicamente; necesitaba decir algo, pero ya no sabía cómo hacerlo.Son momentos excepcionales y los poderes públicos deben actuar de forma excepcional. Tengo la seguridad de que la inmensa mayoría de los ciudadanos queremos que nuestros impuestos se destinen a actos justos y solidarios, no a desahuciar a familias que durante décadas han trabajado y ahora, ante esta grave crisis, son abandonadas. El artículo 47 de la Constitución garantiza el derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada, y señala a los poderes públicos como los veladores de ese derecho. Ahora, es el momento de cumplirlo más que nunca, por los que aún sufren en su silencio.
Isidro Guerrero Guardiola
No hay comentarios:
Publicar un comentario