jueves, 13 de diciembre de 2007

Picasso como terapia

Una columna de Iosu de la Torre en el Periódico de Catalunya.

Igual que hay traumas imposibles de superar, hay terapias que ayudan a combatir los falsos complejos. conozco a un curioso tipo que jura y perjura que nunca viajará a Madrid porque todo lo madrileño le produce sarpullidos. No acepta razonamientos. Simplemente odia Madrid. Al mismo tiempo es un pasionado del arte y la literartura. Tengo la idea de contarle que el Museo Reina Sofía, de Madrid por supuesto, reunirá a partir del próximo febrero 407 piezas de Pablo Picasso procedentes del museo parisino dedicado a la obra de este icono universal. Solo por ver la mayor cantidad de picassos jamás reunida merece la pena viajar a Madrid.
Alguien dijo que el nacionbalismo se cura viajando. Solo falta que llegue el maldito AVE a Barcelona para planificar una excursión. Debo contarle al colega que la agresión no será para tanto porque la estación de Atocha está a cinco minutos caminando del Reina Sofía, vecino honorable del barrio de Embajadores.
Seguro que si vista la expo se sentirá más aliviado, lo que no quiere decir que ya esté vacunado contra su fobia. Es una cuestión de dioptrías.
Un colega fotógrafo viajó al África subsahariana con una oenegé que se dedicaba a curar la vista a personas que de tan pobres no tenían ni para gafas. Una mañana capturó en tres instantáneas cómo le cambiaba la vida a una mujer miopísima a la que le graduaban la vista. la sonrisa que brotaba en aquel rostro al recuperar formas y colores que se estaba perdiendo era de premio. Sorprendente.
¿Qué tiene que ver el fóbico a lo madrileño con una senegalesa que recobra la mirada? Igual es una torpe metáfora, pero es apropiada en el doble sentido que algún día marcará la doble vía del AVE Barcelona-Madrid. Cuando vas a Madrid, vas a Madrid. España es otra cosa. Hay tantas Españas como pueblos contiene el nombre que agrupa a pueblos y gentes con ideas comunes y diferentes, costumbres parecidas y diversas, tradiciones compartidas y desterradas, culturas próximas y fracturadas.
¿Atracarse de picassos una tarde de invierno es una buena terapia para paletos? Yo lo intentaría y el que la rechace, que siga enfermo.

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